Colo Colo de duelo

(ANSA) – SANTIAGO DE CHILE, 11 ABR – Colo Colo canceló sus entrenamientos en señal de luto por la muerte de dos aficionados del equipo chileno en el partido que debió ser suspendido a los 70' de juego frente a Fortaleza por la segunda fecha de la fase de grupos de la Copa Libertadores debido a los desmanes que se registraron en el Estadio Monumental de Santiago.
Una tragedia que reinstaló el debate sobre el postergado proyecto de ley contra la violencia en los estadios y llevó al presidente Gabriel Boric a instruir al Ministerio de Seguridad a darle prioridad en la agenda, mientras Colo Colo aguarda por una dura sanción de la Conmebol tras lo sucedido el jueves por la noche.
"No podemos dejar que la violencia se tome el fútbol, esto no se puede normalizar", indicó el mandatario durante una reunión de Gabinete en el Palacio de La Moneda, tras lamentar el fallecimiento de un niño de 13 años y una joven de 18 años en las adyacencias del Estadio Monumental como consecuencia de los incidentes previos al inicio del partido.
Las dos víctimas se registraron cuando los Carabineros reprimieron a los fanáticos que pretendían ingresar al recinto sin la correspondiente entrada y fueron aplastados por una valla de seguridad de gran peso, sobre la cual -según testigos- pasó un carro hidrante de la policía, razón por la cual dos efectivos se encuentran imputados por el hecho.
Horas después de lo sucedido, se conoció la renuncia de la jefa del denominado "Plan Estadio Seguro", Pamela Venegas, confirmada por el ministro de Seguridad Pública de Chile, Luis Cordero, y se reabrió el debate en el Congreso en torno al proyecto de ley pendiente desde el año pasado que intenta establecer un marco para el desarrollo apropiado del espectáculo del fútbol.
Una de las medidas más urgentes es un registro nacional de aficionados, para el control e ingreso a los estadios, además de la persecución penal de violentos y delincuentes que se esconden en las llamadas barras bravas, pero hasta el momento no se ha logrado consenso entre los parlamentarios. Múltiples voces se levantan hoy urgiendo una nueva ley de Estadio Seguro y reclaman también a que la Asociación Nacional de Fútbol (ANFP) asuma sus responsabilidades en lo ocurrido.
La diputada Lorena Fries, del Frente Amplio, urgió al Poder Ejecutivo a acelerar la tramitación del proyecto de ley, al tiempo que indicó que "el Estado debe asumir su rol, pero también las organizaciones civiles involucradas, como la ANFP, que organiza estos eventos y no puede seguir evadiendo responsabilidades", dijo en diálogo con "Emol". Fries destacó que "el fútbol profesional genera grandes ingresos para las sociedades anónimas que no se sienten obligadas a invertir en la seguridad de las personas".
Erika Olivera, diputada por Demócratas y quien presidió la Comisión de Deportes en la Cámara baja, recordó que la iniciativa legal se despachó al Senado en octubre de 2024 y allí "duerme", al considerar que "la ANFP se desmarca de la responsabilidad y hace un llamado a las autoridades y legisladores para solucionar este tema".
"Sin embargo -recordó- (la ANFP) no ha asistido a ninguna de las invitaciones que se le han cursado desde el Congreso en la tramitación del proyecto que busca modificar la Ley de Estadio Seguro" y señaló que mientras tanto "existen medidas que los clubes pueden y deben tomar sin necesidad de esperar una normativa" legal. (ANSA).
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